El cordón umbilical es una fuente de células madre especialmente útiles (más que otras células madre) para tratar algunas enfermedades graves de la sangre (algunas leucemias, linfomas), tanto en niños como en adultos.
Los cordones que se donan, después de un proceso de preparación, se guardan en un banco de cordones con vistas a su utilización por el paciente compatible que lo necesite. Los cordones que no se donan, sencillamente, se tiran a la basura. Es una lástima.

El cordón umbilical de su hijo, que usted dona, pasa al fondo común del banco público. Si algún día su hijo lo necesitara, se buscaría en el banco el más adecuado para él (cuanto más tengamos, más posibilidades habrá de encontrar uno compatible). ¿Por qué no el suyo? Porque como la gran mayoría de estas enfermedades es de base genética, casi nunca es aconsejable utilizar el propio cordón sino, por el contrario, otro cordón de un niño sano y compatible con el enfermo. Si, excepcionalmente, fuera aconsejable utilizar su propio cordón, sería también posible hacerlo. Si su hijo crece sano, como es lo más probable, su cordón donado podría servir para cualquier otro niño o adulto compatible, que lo necesitara.
Todo sin intercambio de dinero alguno. No le pagamos por su cordón. Tampoco nadie le cobrará por emplear el de un donante. Tampoco le costará dinero el proceso de preparación, ni la conservación del cordón a lo largo de los años. Así funcionan los bancos públicos del Sistema Nacional de Salud conectados todos entre sí. En Málaga tenemos uno excelente y en pleno funcionamiento.

Conviene tenerlo claro. El banco público es un servicio. Si tiene alguna duda o quiere saber más sobre esto, pregunte a su médico o póngase en contacto con: www.donantesmalaga.org o llamando al teléfono: 951 03 41 13
Fuente: banco de sangre de Málaga
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